Peregrino


¿Volver? Vuelva el que tenga,
Tras largos años, tras un largo viaje,
Cansancio del camino y la codicia
De su tierra, su casa, sus amigos,
Del amor que al regreso fiel le espere.
Mas, ¿tú? ¿volver? Regresar no piensas,
Sino seguir libre adelante,
Disponible por siempre, mozo o viejo,
Sin hijo que te busque, como a Ulises,
Sin Ítaca que aguarde y sin Penélope
Sigue, sigue adelante y no regreses,
Fiel hasta el fin del camino y tu vida,
No eches de menos un destino más fácil,
Tus pies sobre la tierra antes no hollada,
Tus ojos frente a lo antes nunca visto.
Luis Cernuda
Desolación de la quimera, 1962

Imagen: fotografía de Cernuda en Burgohondo (Ávila),
en 1932, durante las Misiones Pedagógicas

11 comentarios:

Anónimo dijo...

Y, pese a todo, ¡cuánto quería a España Cernuda! Saludos

K. Whitmore dijo...

Estuve revisitando la página de Cernuda, porque me llamó la atención que hubiera nacido un 20-N, y regresé al regusto amargo de aquella inefable inauguración de la exposición y de declaraciones posteriores. Ni asomo de vergüenza. “[…] ¿Oyen los muertos lo que los vivos dicen luego de ellos?/
Ojalá nada oigan: ha de ser un alivio ese silencio interminable…”.

Y más Desolación:
“[…] No hablo para quienes una burla del destino/Compatriotas míos hiciera, sino que hablo a solas/(Quien habla a solas espera hablar a Dios un día)/O para aquellos pocos que me escuchen/Con bien dispuesto entendimiento./Aquellos que como yo respeten/El albedrío libre humano/Disponiendo la vida que hoy es nuestra,/Diciendo el pensamiento al que alimenta nuestra vida./¿Qué herencia sino ésa recibimos?/¿Qué herencia sino ésa dejaremos?”.

¿No les pitarían los oídos?

Ah, siento haber parecido tan misteriosa pero estoy en ello, en lo de arrancar el blog. La Bahía de la Plata (http://estaeslabahia.blogspot.com) es una de mis playas, por aquello de los mensajes embotellados, y lo de Katherine Whitmore pura envidia, por lo de “La voz a ti debida”.

Y de mi nevera a Visor, no lo dudes. Un beso.
(claramente me pasé de extensión.no volverá a a ocurrir)

Fedosy Santaella dijo...

Sin hijo que te busque. Eso para el que es padre, es duro.

Saludos muchos, Juan Antonio.

juan antonio bermúdez dijo...

El poema es duro, sí, y deja traslucir cierto resentimiento y cierto desencanto (no incompatibles con el amor) hacia el hogar que lo marginó, la patria que lo exilió.
Pero creo que invita también a lecturas más amplias sobre la rebeldía y la libertad, contra las tentaciones acomodaticias.
En este sentido, me parece muy recomendable el análisis que hace Juan Antonio Cardete sobre este poema en:

http://www.lasombradelmembrillo.com/cernudaperegrino.htm

K. Whitmore dijo...

Declaración de intenciones:
No suelo ser muy militante de casi nada, y no puedo estar más de acuerdo con Valente:
“Multiplicador de sentidos, el poema es superior a todos sus sentidos posibles. Y aunque todos ellos nos hubieran sido dados, el poema habría de retener aún de su naturaleza lo que en rigor lo constituye, la fascinación del enigma”.

Anónimo dijo...

Hay un libro interesante de Mario Benedetti, "Andamios", que habla del desexilio, una novela que intenta explicar lo que siente el exiliado desarraigado que cuando vuelve a su patria no la encuentra como fue, sino como es, que no es la patria que él dejó. Así, se ve abocado a un sentimiento perpetuo de desarraigo, donde la tierra que le acogió nunca fue su tierra y la tierra que dejó nunca volverá a serlo. Su patria real es solo su recuerdo de ella.

juan antonio bermúdez dijo...

k. whitmore: Me sumo a tu declaración de intenciones, me parece muy buena la cita de Valente. Pura teoría de la recepción fecundada además por el enigma de lo poético.

Loruka y Fanshawe, sobre lo que escribís hay una anécdota bastante divertida de Fellini, que creo que no fue exactamente un nostálgico pero sí un exiliado de la memoria, un gran "recuerdista". Cuando iba a rodar Amarcord (que traducido del romañolo sería precisamente algo así como "Yo me acuerdo") se trasladó a Rimini en busca de los escenarios de su infancia y su adolescencia. Él se había ido a Roma treinta y tantos años antes y no había vuelto. Y en ese intervalo Rimini había pasado de pequeña ciudad provinciana en la que todos se conocían a emporio turístico.
Las plazas, las tiendas, los hoteles, ya no eran los mismos. La gente, tampoco, claro. Y Fellini decidió entonces volver a Roma y construir en un estudio y en otra pequeña ciudad cercana a Roma una "Rimini más Rimini que la verdadera Rimini".

Anónimo dijo...

No tiene na que ver, pero viendo Amarcord el otro día yo, que chuleo tanto de saber italiano, no entendí una papa. Jodío dialecto romagnolo...

K. Whitmore dijo...

…y juntando exilios
+ paraísos perdidos
+ identidades patria-infancia
= “Estos días azules y este sol de la infancia”,
que como verso-bucle-fin de trayecto no le salió del todo mal a D. Antonio.

Besos.

Ornela Laezza dijo...

este es un escrito que veo muy claro, misteriosamente desenbarque en esta aventura de viaje hace ya tres anios y leo estas palabras que devo decir me estremecen ... gracias por havermelas hecho conocer...


destino... que todo caiga en el momento justo... ahhh la maravillosa casualidad inexistida deja su marca...

saludos

juan antonio bermúdez dijo...

es una alegría compartir contigo el estremecimiento de estos versos, long time woman.
saludos y disculpas por haberme retrasado tanto en la respuesta.