Entre la legalidad y la justicia, elegimos la justicia



Publiqué el poema de Juan Gelman que aparece en el mensaje anterior para celebrar que ha obtenido, con todo merecimiento, el Premio Cervantes. Pero ese texto de Gelman cobra ahora un significado especial por todo lo que está pasando alrededor del CSOA Casas Viejas (Plaza del Pumarejo, Sevilla).

Durante veinte años, ese local estuvo abandonado por sus propietarios (dueños de varios edificios más en la zona), pero en los últimos seis Casas Viejas ha sido un espacio de encuentro social, cultural y político en el que se han organizado actividades abiertas y autogestionadas: teatro, música en vivo, bailes, proyecciones, debates, biblioteca, talleres...

A las siete de la mañana de este jueves, con nocturnidad y alevosía, comenzó un desalojo anunciado. Desde entonces, en el local y en los alrededores se están llevando a cabo numerosas actividades de resistencia pacífica y solidaridad con este proyecto, que parte de la ilegalidad de una acción (la ocupación) para combatir una injusticia (el abuso de la especulación inmobiliaria y la incompetencia de las autoridades para atender las demandas vecinales). La represión policial de estas actividades de protesta y resistencia pacífica ha sido, una vez más, repugnante.

Los versos de Gelman resuenan con fuerza en medio de estos hechos: "Hay que aprender a resistir. / Ni a irse ni a quedarse, / a resistir, / aunque es seguro / que habrá más penas y olvido."

Están haciendo un seguimiento exhaustivo de todo esto en Indymedia Estrecho y en kaosenlared.net.
También se puede escuchar una crónica del desalojo y de las reacciones en masvoces.org.
Y la noticia está siendo recogida también por otros medios, como por ejemplo
El País (aquí y aquí).

2 comentarios:

Víktor Gómez Valentinos dijo...

Compa, voy leyendo en tu blog, me vienen tus palabras otras y las propias, tus lecturas y tus versos, atiendo. Y se aviva entre mi tiempo en tu blog y los paseos luego por la ciudad, algo erráticos y desprogramados, aquel decir de Eduardo Milán con el que cerraba un poema:

Síguete a ti misma que la otra tiene estrellas / rincones, música, olfato./ Tú, tu saber, un corazón que vuelve. //

Aupa Juan Gelman!!

Un abrazo va,

Tu Viktor

Anónimo dijo...

Aquí dejo un artículo de Carlos Taibo para la reflexión...

http://www.elpais.com/articulo/
opinion/CS/Casas/Viejas/
elpepuopi/20071206elpepiopi_8/Tes